Bodega Vega Sicilia
Año de fundación | 1864 |
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Enólogo |
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Uvas | |
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Tierras bañadas por el Duero, un clima severo, unas manos expertas, un pacto con el tiempo. Dedicación, alma, pasión... Un misterio imposible de explicar.
Hay quien piensa que el mito de Vega Sicilia surgió por ser un vino aristocrático, escaso, al alcance de algunos afortunados, un objeto de deseo que sólo unos pocos privilegiados podían disfrutar. Sin embargo, lo que muchos no saben, es que el verdadero origen del mito se encuentra en una historia de ilusión, compromiso y paciencia a orillas del Duero, a su paso por el corazón de Castilla, donde el río baña y alimenta una finca única y singular... casi mágica.
Esta Tierra yerma, enjuta, dura y sabia estaba destinada a algo grande. Debía aliarse con el Tiempo para cumplir su gran sueño: dar lo mejor de si misma, lograr cultivos extraordinarios que le llenasen de orgullo y fuesen muestra del esplendor de la naturaleza. Pero, para ello, Tierra y Tiempo necesitaban la ayuda del hombre. Alguien que fuera sus ojos y sus manos y cultivase respetando los ritmos de
la naturaleza. Porque solo así, cuando se tiene la humildad de aceptar el mandato de la naturaleza, se logran frutos excepcionales.
Fueron transcurriendo los siglos a la espera de que alguien escuchara la llamada de esta Tierra mágica. Y es que solo unos pocos tienen el don de ver más allá, de escuchar lo que otros solo oyen, de sentir lo que otros no sienten. Hasta que un día el destino trajo a un hombre que atendió su llamada, un hombre que creyó en una intuición y cambió el tradicional cultivo de cereales por las mejores cepas del siglo XIX. Un hombre que supo aprender de la naturaleza, respetó pacientemente sus ritmos, cuidó a la Tierra y protegió al Tiempo, logrando así un equilibrio perfecto.
Con el otoño llegó la vendimia y Tierra pudo, al fin, acariciar su sueño, aquello para lo que estaba predestinada; las uvas obtenidas mostraban un carácter y personalidad incomparables y, tras madurar en el silencio y la soledad de la bodega, se convirtieron en uno de los grandes mitos de la historia del vino. Por fin, había nacido Vega Sicilia.