Bodegas Borsao

Fundada en 1958 en la localidad de Borja (Zaragoza), la bodega ha sabido evolucionar desde sus raíces cooperativas hasta convertirse en una marca sólida y prestigiosa, sin perder el vínculo con su tierra ni con las personas que la trabajan.

La esencia de Borsao reside en su viñedo: más de 1.500 hectáreas cultivadas por cientos de viticultores locales, muchos de ellos propietarios de pequeñas parcelas con viñas viejas, algunas de más de medio siglo. Estos viñedos, plantados en suelos pedregosos y calizo-arcillosos a distintas altitudes, dan lugar a uvas de gran concentración, frescura y riqueza aromática. La variedad Garnacha, en particular, encuentra aquí su mejor expresión, dando lugar a vinos intensos, frutales y de notable estructura.

En su moderna y eficiente bodega, Borsao combina técnicas tradicionales con tecnología de vanguardia para garantizar el máximo cuidado en cada etapa del proceso. Desde vinos jóvenes y expresivos hasta etiquetas más complejas y envejecidas, la bodega ofrece una amplia gama pensada para satisfacer a todos los amantes del vino, sin renunciar nunca a la calidad.

Comprometida con la sostenibilidad, Borsao ha integrado prácticas respetuosas con el medio ambiente en su proceso productivo: desde el diseño de sus instalaciones hasta el uso responsable de recursos naturales. Su modelo de desarrollo contribuye también a mantener la economía y la vida en el entorno rural.

Con presencia en más de 60 países y múltiples premios en su haber, Bodegas Borsao es sinónimo de excelencia accesible. Cada botella representa el alma de una tierra y la pasión de quienes la cultivan. Una invitación a descubrir el sabor auténtico de la Garnacha aragonesa.